CONTENIDO:
A la pregunta que significa la palabra HOMBRE encontramos la siguiente
definición:
HOMBRE: el hombre, en el sentido general, es un ser vivo con
sentimientos, valores, aptitudes, con mente y creencia propia; que se distingue
por poder dar una respuesta racional a cualquier pregunta racional que se le
haga sobre sí mismo.
El filósofo griego Aristóteles dijo una vez: “el hombre es un animal
político y social por naturaleza”. El hombre nunca podrá vivir completamente
solo, sin la ayuda de los demás. Necesita estar en constante interacción con
las demás personas, quienes en un momento dado te pueden ayudar o pedir ayuda,
acompañar, enseñar y compartir experiencias y sentimientos.
Dios creó al hombre y a la mujer como seres sociables: “no es bueno que
el hombre esté solo”, Génesis 2:18. El hombre no se auto salva, sino que
conviene a la naturaleza humana avanzar hacia el Señor con la colaboración de
otros hombres y mujeres.
Todo ser humano sea hombre o mujer por su naturaleza es un ser social,
en cuanto que hace parte de la sociedad, con derechos, deberes, compromisos y
responsabilidades. Vive en comunidad y necesita de ella para su desarrollo
personal. Se enriquece y enriquece a la comunidad con el aporte de sus valores
y el sentido de pertenencia hacia ella. Sus actitudes positivas o negativas,
favorecen o entorpecen su crecimiento. Todo acto que atente contra la comunidad
es un atentado contra él, contra ella misma y contra su dignidad personal.
El ser humano como persona ocupa un lugar muy importante dentro de la
comunidad y su dignidad está por encima de cualquier otra realidad. Todo ser
humano, hombre o mujer como ser social está llamado a perfeccionarse, tarea que
sólo puede realizarse en comunión con las demás personas. Los hombres y las
mujeres son seres comunitarios que necesitan de los demás, pueden alcanzar su
plenitud solo en y con la comunidad. Al agruparnos nos protegemos y realizamos
porque la comunidad produce: cohesión, pertenencia e identidad.
La comunidad permite que se haga el desarrollo
de la personalidad tanto de mujeres como de hombres, porque al interactuar con
el otro empieza a gestar proyectos de vida, a construir herramientas sociales que le permiten, no hacer un mundo individual sino social. Toda persona
tiene la capacidad de interrelacionarse, de construir nuevos nidos afectivos,
de vincularse a redes sociales.
LA PERSONA ES UN SER EN RELACIÓN.
El ser humano es siempre el conjunto de sus relaciones sociales. No
podría hacer frente a su existencia, a su vida diaria sino estableciera
relaciones con otros hombres y mujeres. En la acción, el hombre y la mujer
transforman la realidad y se transforman a sí mismos y a la sociedad. Necesitan
trascender, creando y compartiendo.
Como ser social, debe entenderse como ser necesitado del acercamiento
del otro, comprendiendo las diferencias individuales sin dejar de asumir una
posición de conciencia crítica. El hombre es un ser en relación consigo mismo, con los otros seres, con
el mundo y con Dios. Como ser humano, hombre o mujer, me relaciono con:
1. Las personas: cuando me conozco, me quiero y acepto tal como soy con mi realidad
familiar, mi cultura y mi entorno social; me propongo metas para ser cada día más
persona; respeto mi dignidad de ser humano; me perdono y adquiero nuevas
posibilidades de cambio; trabajo día a día por ser auténtico (a), coherente con
lo que pienso, digo y hago.
2. Con Dios: cuando
me siento hijo (a), estoy seguro (a) de su amor y protección, cuando busco
comunicarme con Él, cuando mis acciones están acordes con sus enseñanzas y
mandatos, cuando comunitariamente celebro su acción salvadora.
3. El mundo: cuando
pongo todas mis potencialidades y valores al servicio de la creación para
cuidarla, embellecerla, transformarla, recrearla y perfeccionarla. La actividad
del hombre en el mundo tiene además el objetivo de buscar la armonía, la
distribución equitativa de los bienes dados por Dios para todos los seres
humanos a fin de que cada uno disfrute de ellos en justicia y paz.
4. Los otros seres: cuando sé cómo abrirme a los demás, escuchándolos, siendo sinceros,
desterrando el egoísmo, la violencia, los deseos de venganza; aceptando la
diferencia de cultura, credo religioso y pensamiento; defendiendo la vivencia
del amor, la amistad y la fraternidad.
ACTIVIDADES PEDAGÓGICAS: después de leer atentamente el texto, analiza y
responde estas preguntas: (debes entregar un trabajo escrito con las respuestas
a estos interrogantes)
1.
¿Cuál es la idea central del texto?
2.
Según la definición de hombre dada
construye tu propio concepto.
3.
¿Por qué dice Aristóteles que el
hombre es un ser social por naturaleza?
4.
¿Es posible que el hombre y la mujer
puedan realizarse plenamente en soledad?
5.
¿Cuál es el papel o rol del ser
humano dentro de una comunidad?
6.
¿Qué beneficios obtiene el hombre de
la vida en comunidad?
7.
Lee el texto bíblico de Mateo 22:34-40 y responde: ¿Qué mensaje nos envía el Señor en esta lectura?
8.
¿Cuál es el sentido de amar al
prójimo como a uno mismo?
9.
¿Estamos cumpliendo con el propósito
de este mandamiento?
10.
¿Qué podrías hacer para acoger a
personas que te presentan o que conoces por primera vez?
11.
¿Qué puedes hacer para acoger a las
personas con las que no congenias?
12.
Extrae 20 palabras claves y
desconocidas de la lectura busca su significado.
13.
Construye una sopa de letras con
estas palabras.